Tres procesados son sentenciados a 25 años de reclusión mayor por asesinato de padre e hijo
Quito, jueves 26 de febrero del 2015.- Tres de cinco procesados fueron sentenciados a 25 años de reclusión mayor ordinaria por el delito de robo con muerte de dos ciudadanos (padre e hijo).
Los jueces del Tribunal Primero de Garantías Penales los declararon como autores materiales del hecho a Meder S., Ramiro R. y Ruben J., por su participación directa en el asesinato de un hombre y su hijo, en la parroquia de Amaguaña, al suroriente de Quito. Ocurrió mientras les robaron 25.000 dólares dentro de un bus de servicio público, en febrero del 2014.
También se ratificó el estado de inocencia para Frank R. y Jairo G., por no encontrar suficientes elementos en su contra.
El hecho ocurrió cuando José Ch. (63 años) y su hijo Fernando Ch. (33 años) salieron de un banco en Sangolquí (oriente de Quito) luego de cambiar un cheque, producto de la venta de un vehículo. El dinero iba a ser utilizado para pagar una deuda.
Tras un forcejeo, el hijo recibió varios impactos de bala y murió en el lugar. Su padre falleció en un hospital de Sangolquí.
La audiencia de juicio se inició el pasado lunes y culminó la noche del 26 de febrero del 2015. La Fiscalía presentó 25 testigos, mientras que los procesados escucharon la audiencia por video conferencia desde el Centro de Rehabilitación Social de Guayaquil como medida de seguridad.
La Fiscalía presentó como prueba fundamental el video grabado en el interior del bus donde se evidencia que los procesados abordaron a las víctimas y con pistolas en mano exigían la mochila en la que estaba el dinero.
Luego de un forcejeo, el hijo recibió varios impactos de bala y murió en el lugar; su padre falleció en un hospital de Sangolquí.
Los tres sospechosos huyeron en dos motos. Todo quedó grabado en las cámaras de seguridad del transporte público.
La Fiscalía presentó como prueba lo que se evidencia en el video del interior del bus, informes de balística y médico legal de los cuerpos entre otras pruebas.
Dato
El procesado Meder S. fue condenado a 25 años de reclusión mayor, por la muerte del exboxeador Jaime Quiñónez, quien se encontraba prófugo, luego de una fuga masiva del Centro de Detención Provisional, en diciembre de 2013.