Los estudiantes conocen sobre medicina legal en el Centro Forense de Cuenca
Los estudiantes de la Universidad Católica de Cuenca conocen sobre los análisis que se hacen en el laboratorio de Histopatología.
Cuenca, 20 de junio de 2015.- 300 alumnos de seis colegios y universidades conocieron la utilidad del Centro de Investigación de Ciencias Forenses (CICF) de Cuenca. Lo hicieron durante diferentes visitas entre abril y junio de este año.
Para el fiscal Provincial del Azuay, Lizandro Martínez, es importante que los estudiantes conozcan que en estos Centros Forenses, mediante los equipos de tecnología moderna instalados en las diferentes salas, los médicos forenses y laboratoristas efectúan las pericias científicas. Además que los resultados son utilizados por los fiscales como pruebas para esclarecer los hechos delictivos.
“Es bueno que sepan que la investigación forense no son solo autopsias y que se motiven a estudiar áreas vinculadas a la medicina legal y ciencias forenses”, aseguró Martínez.
El sistema de Centros Forenses es impulsado por la actual administración de la Fiscalía General del Estado. El objetivo es efectuar una investigación científica del delito y brindar un servicio oportuno y gratuito a la ciudadanía.
El CICF de Cuenca es uno de los ocho centros implementados en el país. Este fue inaugurado en febrero del 2015, con una inversión de 5 millones de dólares en sus instalaciones y en el equipamiento.
Durante las visitas estudiantiles, los recorridos por el CICF se inician en el área de Tanatología Forense. Allí reciben explicaciones sobre cómo se realizan las autopsias y los análisis de restos exhumados, en dos salas que cuentan con equipos, instrumental y más implementos modernos.
Desde su apertura hasta mediados de junio, en el CICF de Cuenca se efectuaron 191 autopsias, a cadáveres provenientes de diferentes lugares de Azuay y de Morona Santiago.
Marco Ojeda, docente de Medicina de la Universidad de Cuenca, manifestó que la visita al CICF despertó interés en los estudiantes que ahora quieren especializarse en un área de la medicina legal, hasta ahora no muy conocida en la ciudad. Pues esta no se refiere solo a las autopsias, sino a una investigación forense integral mediante el análisis de órganos humanos, muestras de sustancias y más evidencias recolectadas en los sitios donde ocurrieron los delitos.
Rubén Muñoz, uno de los médicos forenses del CICF de Cuenca, consideró que es fundamental que los estudiantes de Medicina y de Derecho tengan conocimiento sobre los procedimientos para las autopsias y la importancia del estudio médico legal.
A Mateo Flores, estudiante de Ciencias Químicas de la Universidad de Cuenca, esta visita le permitió conocer lo que constituye el CICF. “Hay diferentes áreas en las que podemos especializarnos y no son las mismas que ya están saturadas”.
Para las pasantías estudiantiles
El recorrido avanza hacia la segunda planta del edificio de tres pisos. En esta se encuentra el área pedagógica, diseñada para las pasantías de los estudiantes. Desde ahí, ellos pueden observar el proceso de las autopsias en una pantalla didáctica o a través de una ventana amplia, sin necesidad de un contacto directo con el cuerpo ni con los médicos.
Andrea Álvarez, alumna de Medicina de la Universidad de Cuenca, fue una de las visitantes. Para ella fue importante conocer las áreas donde junto con sus compañeros efectuarán las pasantías, ya que le permitió constatar las ventajas que tendrá durante sus prácticas.
Según el fiscal Martínez, “en las antiguas morgues los estudiantes rodeaban la mesa de autopsias, en un área reducida, sin ningún control ni prevención para su salud. A poca distancia se guardaban los cuerpos en espacios sin refrigeración”.
Explicaciones prácticas
Los estudiantes también se familiarizan con los laboratorios donde se realizan los análisis científicos de las muestras y evidencias. En el laboratorio de Química, por ejemplo, el especialista David Mendoza explica que el CICF de Cuenca dispone de sistema de cromatografía de gases líquidos y espectrómetro de masas.
Es decir, sirve para analizar las muestras para determinar, por ejemplo, el consumo de drogas mediante los análisis de muestras de cabello.
En este laboratorio incluso se hacen pericias para esclarecer casos de mala práctica médica, por mal suministro de medicamentos o si una persona murió por ingesta de licores adulterados, entre otros.
Entre tanto, en el laboratorio de Histopatología los estudiantes aprendieron que hasta allí llegan las muestras tomadas de los órganos de las víctimas, para mediante un análisis macroscópico y microscópico ayudar a revelar qué ocasionó el fallecimiento.
En las visitas, los alumnos también conocen el laboratorio de Biología. Las especialistas de esta área les explican que allí se analizan muestras de proteínas P30 (proteína del líquido seminal humano), para esclarecer delitos sexuales. Además, se hacen pericas sobre fluidos biológicos, como saliva y otros.
Kevin Mora, estudiante de Bachillerato del Colegio Benigno Malo, afirmó que es importante saber que existe un establecimiento que está al servicio de la ciudadanía. Además, donde los estudiantes pueden conocer sobre una autopsia y reforzar conocimientos en áreas que estudian en clases, como química y biología.
Un aspecto importante es el cuidado del medioambiente que se aplica en estos Centros Forenses. El administrador del CICF de Cuenca, Patricio Ango, informó a los estudiantes que las aguas que se producen son previamente tratadas antes de enviarlas al sistema de alcantarillado. Además se dispone de una planta biodigestadora (tratamiento) de desechos sólidos.
Dato:
Las visitas al CICF de Cuenca continuarán durante los próximos meses. Además de los estudiantes, acudirán representantes de instituciones públicas y privadas.