En dos juicios por muerte de neonatos en hospitales se ha determinado culpabilidad de acusados
Guayaquil, 12 de julio del 2015.- El impulso generado por el fiscal General del Estado, Galo Chiriboga Zambrano, a lo largo de los procesos, y las investigaciones de los fiscales de las causas fueron determinantes para la consecución de dos sentencias condenatorias por homicidio inintencional, tras la muerte de neonatos en dos hospitales públicos del país.
La primera sentencia que se conoció se dio en Loja el 25 de abril del 2013, cuando el Tribunal Primero de Garantías Penales de esa jurisdicción declaró culpable del delito de homicidio inintencional a Manuel T., por la muerte de 20 neonatos en el Hospital Isidro Ayora.
La resolución se dictó una vez que los jueces escucharon los alegatos en favor y en contra del procesado, quien en el momento en que ocurrieron los hechos (diciembre del 2010 y enero del 2011) ocupaba el cargo de subdirector de la mencionada casa de salud.
Durante el proceso, el fiscal Rodrigo Galván Calderón también vinculó a los ciudadanos: Augusto F., responsable del servicio de Neonatología en el período investigado, a Dolores del Cisne C., líder de Enfermería de Neonatología y a Hefner A. Director del Hospital Isidro Ayora de ese entonces.
Estas tres personas, en su momento, lograron su desvinculación acogiéndose a la suspensión condicional del procedimiento que fue planteada por sus defensas y aceptada por los jueces conocedores del proceso investigado.
Las investigaciones determinaron que la bacteria Enterobacter infectó a los neonatos, tras establecer errores en los procedimientos de limpieza del área de Neonatología.
Mientras que en Guayaquil, el 11 de julio de 2015, el Tribunal Décimo Primero de Garantías Penales del Guayas declaró culpables del mismo delito a Aracely P. y Ricardo A., exdirectora y jefe del Área de Neonatología del Hospital Francisco de Icaza Bustamante, por la muerte de 3 neonatos.
La investigación penal contra los dos ciudadanos inició en febrero del 2011 tras el fallecimiento de 11 infantes ocurrido en ese hospital, de los cuales a tres se confirmó su muerte por la propagación de la bacteria serratia marcescens.
La fiscal Margarita Neira presentó como testigos principales a los médicos que realizaron las pericias y reconocimientos del lugar en donde se produjo la muerte de los infantes y las experticias realizadas a historias clínicas, informes y procedimientos que se realizaron ante el brote de la bacteria.