Sala Penal de Manabí impuso pena de 7 años a dos acusados por tentativa de asesinato


La Fiscalía de Manabí logró sentencia por tentativa de asesinato.

Portoviejo, 15 de octubre de 2015.- A 7 años de reclusión mayor ordinaria fueron sentenciados Carlos M. y Washington M. por tentativa de asesinato contra un ciudadano, hecho registrado el 19 de agosto de 2007 en Portoviejo, Manabí.

La Sala de lo Penal de la Corte Provincial de Justicia de Manabí emitió por escrito, el miércoles 14 de octubre, la decisión tomada el 28 de abril de 2014, tras la audiencia de recurso de apelación interpuesto por el procesado Carlos M. y por la Fiscalía General del Estado a la sentencia absolutoria dictada a favor de Washington M.

Carlos M. fue sentenciado por el Segundo Tribunal de Garantías Penales de Portoviejo a 7 años de reclusión mayor ordinaria.

La Sala, integrada por los jueces César Arroyo, Ana Loor y Enny Zambrano, declaró que no procede la apelación planteada por el procesado Carlos M. De esta manera, se confirmó la sentencia condenatoria dictada en su contra el 20 de enero de 2014.

En cuanto a la apelación planteada por la Fiscalía, la Sala aceptó y revocó la sentencia no condenatoria dictada a favor de Washington M.

En su lugar, los jueces dictaron sentencia condenatoria, imponiéndole la pena de 7 años de reclusión mayor ordinaria, al considerarlo también autor de tentativa de asesinato, delito tipificado en el art. 450 del Código Penal, en concordancia con los artículos 16 y 46.

Según la teoría del caso expuesto por el fiscal Víctor Menéndez, el hecho se dio en instantes en que la víctima recorría en bicicleta por el sector del cementerio de Portoviejo,  cuando sufrió un atentado con siete disparos de arma de fuego.

Tras los disparos y herido de gravedad, el ciudadano, de 18 años, fue trasladado al Hospital Verdi Cevallos Balda, en donde reveló a agentes de las Policía Judicial sobre que quienes atentaron contra su vida fueron Carlos M. y Washington M.

Asimismo, la madre de la víctima detalló en su denuncia, que Carlos M. fue quien realizó los disparos en contra de su hijo con una ametralladora y cree que lo hizo porque su hijo fue testigo presencial de la muerte de un familiar, en octubre de 2006.

Desde el 29 de octubre de 2008, Carlos M. cumple dos sentencias condenatorias: una de 3 años de prisión dictada por el Tercer Tribunal de Garantías Penales de Manabí por el delito de tenencia de armas y otra de 18 años de reclusión mayor especial, impuesta por el mismo Tribunal por el delito de asesinato.

Antecedentes del caso

En el día señalado para la audiencia de juzgamiento, los sujetos procesales presentaron sus pruebas y el Tribunal anunció una sentencia mixta y una vez notificada fue apelada.

En la diligencia, la Fiscalía presentó 12 testigos, entre quienes constaron familiares, testigos oculares y el médico perito, quien realizó el examen médico-legal de lesiones. Este, en su informe detalló que Pedro Toala Rezabala había sido herido con varios disparos que le comprometieron varios órganos internos y una lesión en la columna vertebral.

También escucharon los testimonios de los agentes de la Policía que realizaron el reconocimiento del lugar de los hechos, el parte de identificación de la persona herida, el cotejamiento balístico y de quienes realizaron la investigación por la denuncia presentada, los que sustentaron sus informes como pruebas documentales.